Ligamento Clavero

Que no hay derecho.

Acabo de enterarme de que un tipo al que conozco trabaja para la Administración, le acaban de operar de una rodilla (la otra se la operaron hace casi un año con su correspondiente baja de siete meses) y va a estar casi otro año más de baja.

¿Que no hay derecho a estar de baja?
No, no digo eso.

Este señor se queja de que le han quitado los moscosos (permisos de libre disposición) del año que pasó de baja, y que ahora que puede juntar las vacaciones acumuladas (porque al estar de baja las vacaciones no las pierdes, aunque se acabe el plaz,o) con la baja que acaba de recibir por la nueva operación, más las vacaciones del nuevo año, no engancha sin trabajar los dos años.

Aunque estando de baja le he visto trabajar en un taller de coches y cargar cajas en una camioneta, no voy a entrar en eso, no hay derecho a que lo del parrafo anterior lo diga en un bar cuando le operaron hace dos días.

Tiene derecho a baja, a moscosos, a vacaciones, a dormir en el lado de la cama más alejado de la puerta de la habitación si quiere, de verdad, tiene derecho a todo lo que la sociedad y las leyes le digan que tiene derecho, pero no tiene derecho a no cuidarse la lesión.

Yo veo mal que algunos faltos de empatía piensen que las bajas se pasan encerrado en casa, pero también veo mal no cuidarse como dios manda una lesión que se ha intervenido con dinero de todos.

Si no estás para currar no significa que no estés para caminar o dar un paseo, con muletas o en coche, pero si te acaban de abrir una rodilla no veo bien que te metas en un bar a ponerte tifo de cerveza al día y medio siguiente.

Cuídate y cuéstanos menos a todos.

Estar de baja no significa estar encerrado en casa, pero tampoco son vacaciones.
Aunque para eso se pagan los impuestos como dice, me parece un caradura.

Y este ejemplo lo podemos extrapolar a todo.

Que no te cacen por conducir borracho no es una suerte, es mala suerte para el resto.
Defraudar a Hacienda no te beneficia, nos perjudica a todos.
Sobrepasar tus derechos por querer cobrarte los excesos de otros te convierte en la misma persona de la que te quejas.

Y esto lo escribo sin haber cobrado baja durante un año y tres meses, y habiendo sido tirado en un Tribunal Médico con un informe que decía que yo no tenía rehabilitación.

Por la noche fui a ver a Alex Clavero en el Hebe, Vallecas, al show del Madrid Comedy Club Underground... bien, sencillito y divertido.
Me encontré con Lucille y Rober y nos reímos juntos.

Denny Horror vino a darme dos besos.
Me sentí violento.
No olvido que en una entrevista en los 40 Principales negó mi existencia, obvió que fui yo quien le presentó a Enrique San Francisco, mintió sobre el principio de su efímero salto al estrellato de coñac y puro.
Aun así sentí cariño por el tiempo que pasamos juntos, el detalle de visitarme en el hospital y dejarme (para más tarde regalarme) un libro de Wodehouse.
Pero aplicando la razón, me sobraba esa persona, sólo me ha aportado mal rollo en la balanza.

Cuando Clavero terminó de hacernos reír con la sencillez del humor popular, nada criticable pero obvio para mí, aplaudí para agradecerle el esfuerzo y el buen rato.

Cobré y volví a sentirme fuera de lugar.

Lucía y Roberto me acercaron a casa.
Me comí unas sobras.
Me metí en la cama.
Era la 01:40h de la mañana.